UCR: BAJAN DE LA MESA DIRECTIVA A LA DIRIGENTE QUE DENUNCIÓ A APARICIO

En una resolución express, le quitaron su función de encargada de prensa en la mesa directiva del comité distrital. ¿Un correctivo por su reclamo?

En pleno verano, la UCR de Malvinas Argentinas puso en movimiento su estructura partidaria para reunir a su mesa ejecutiva. ¿El motivo? Disponer la destitución de su hasta hace poco secretaria de prensa y relaciones públicas, Ruth Margarit. ¿Los cargos? Haber subido algún que otro contenido considerado inadecuado en las redes sociales oficiales del partido. Nada grave. Por citar alguno, el haber llamado a votar por el hoy concejal Lucas Aparicio, que encabezó la lista de Juntos en Malvinas Argentinas.

Margarit “seguirá siendo vocal pero no podrá hablar ni publicar en nombre del partido ni de este comité”, según explica un comunicado firmado por Amparo Cataldi (vicepresidenta), Marcelo Mamchur (secretario general), Pablo Sánchez (protesorero) y Santiago Araujo (secretario de Acción Política), con la llamativa ausencia del presidente Luis Pescel.

La cuestión parece ser bastante nimia como para que amerite ser tratada casi en trámite express, desafiando el receso veraniego y las tórridas temperaturas que marcan a fuego estos primeros días del 22. Se trata de algo que, a todas vistas, podría haber sido dejado para más adelante.

Aunque para entender las urgencias hay que señalar que Margarit es la dirigente que hace unos días salió a denunciar, a través de Tiempo de Tortuguitas, al hoy concejal Lucas Fernández Aparicio, al que le reclama una deuda en relación al uso de su local, durante la campaña. Al parecer, los firmantes de su destitución son parte de un bloque alineado a Fernández Aparicio, y de ahí la celeridad en aplicarle esta suerte de correctivo.

Por su parte, el concejal Santillista desmintió en diálogo con este cronista la versión de su denunciante. “El local fue puesto a disposición de la campaña, nunca lo alquilé. Tengo otros locales alquilados durante la campaña y todos tienen su contrato firmado, algo que no pasa con este ya que no fue alquilado”, aseguró. La controversia por ahora sigue y amenaza llegar a ámbitos judiciales.

Luis Melillo