UN CIERRE MARCADO POR EL HERMETISMO EN EL FDT MALVINENSE

A poco de que venza el plazo, hay pocas certezas. Sol Jiménez tendría asegurada su reelección. El armado debe incluir al FR y otros sectores aliados.

Sol Jiménez, días atrás con Nardini. Su nombre suenra fuerte para la lista del Frente de Todos

Ya falta muy poco para el cierre de listas. En el Frente de Todos de Malvinas Argentinas, la atención principal se la lleva las menciones que en los últimos días refieren la posibilidad que el intendente Leo Nardini tenga un lugar de privilegio en la lista para diputados nacionales. Algunos lo dan con fuertes posibilidades y otros lo ubican dentro de un lote de jefes comunales que podrían ser, entre ellos Martín Insaurralde. De una manera u otra, para Nardini es todo ganancia, ya que su nombre se instaló entre los mejores que tiene la coalición.

En otro plano está el tema de la conformación de las listas para concejales. La cuestión se dirime -como es habitual en la estructura que hoy gobierna el distrito- en un fuerte hermetismo. No es una tarea fácil el armado ya que habrá que hacer lugar a propios y aliados, entre ellos el Frente Renovador, las organizaciones sociales y los excariglinistas.

En medio del hermetismo, las fuentes consultadas por Tiempo de Tortuguitas coinciden en que hay una reelección prácticamente confirmada. Es la de Sol Jiménez. Aunque no hay certeza plena, se presume que sería quien encabece la lista, teniendo en cuenta que su nombre ya está instalado en la sociedad malvinense.

Más allá de esto, el resto son especulaciones sin demasiada consistencia. Del oficialismo puro, además de Jiménez, terminan su mandato Andrés Hidalgo y Gustavo Nacimiento. No hay certezas acerca de si seguirán o si vuelven al ejecutivo.   

Respecto al Frente Renovador, terminan sus mandatos el presidente de la bancada, Mario Gualmes y Andrea Bonfanti. Ninguno de los dos podrá renovar ya que vienen de cumplir dos mandatos y la ley impulsada en 2016 por su jefe político Sergio Massa se los impide. Se descuenta que el espacio tendrá al menos un lugar con factibilidad de ingresar, pero en este caso tampoco trascendieron nombres. En el caso de Gualmes, se especula que podría instar a la inclusión de su esposa, Sonia Alfonso, que ya fue concejal en los años 2000.

También terminan sus mandatos dos concejales aliados al bloque oficialista: Andrea Palavecino y Ramiro Ferrau. Como los Renovadores, ellos tampoco podrán ir por la reelección al completar dos mandatos.

Jimena de Lara, de La Cámpora, también termina mandato. Es seguro que su organización tendrá un lugar con expectativas de entrar. La continuidad es factible teniendo en cuenta que la concejala mantiene una buena relación con el oficialismo local. Pero queda sujeta al lugar que se les asigne en la lista, lo que determinará si es una plaza femenina o masculina.

Aunque no ponen en juego ningún lugar, también entran en la puja Los Cayetanos, que integran el Movimiento Evita, Somos Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa. Habría consenso para que sea un representante de la CCC, teniendo en cuenta que el Evita ya tiene un representante.

Otros dos concejales aliados al oficialismo que terminan su mandato en diciembre son los excariglinistas Silvana Segovia y Fernando Schachtl. Segovia ensayó en estos días un acercamiento al randazzismo, pero ese espacio tiene una interna demasiado complicada como para darle un lugar.

Ninguno de los dos aparece con posibilidades de tener uno en la lista de Nardini. Más allá del hermetismo que predomina en el oficialismo malvinense, trascendió que se viene una campaña de trabajo intenso para el espacio, que ya se fijó un desafío para las generales del 14 de noviembre: lograr un resultado que asegure la obtención de nueve de las doce bancas en juego.