CAYÓ EL PRÓFUGO POR EL FEMICIDIO DE FLORENCIA

Lucas Borrachia fue encontrado en un hotel de CABA. Lo detuvieron efectivos de la Ciudad y de la Provincia.

Borrachia, apenas detenido en CABA (foto captura de video C5N)

Lucas Borrachia, el prófugo por el feroz femicidio de su pareja Florencia Ovejero (21) -la madrugada del sábado, en Grand Bourg-, fue encontrado hoy por la Policía en un hotel de la Ciudad de Buenos Aires.

El joven, de 23 años, es señalado por la muerte de la joven desde el mismo momento en que su familia encontró su cuerpo sin vida, ensangrentado, a primera hora de la mañana del sábado.

Borrachia la había matado a puñaladas (se supo por estas horas que fueron 35). En la casa se encontraba el hijo de Florencia, de tan solo 4 años. Los familiares de la joven narraron el traumático momento en el que el niño intentaba contarles lo sucedido. “Lucas la cortó a mamá con un cuchillo y ella ahora duerme”, fueron sus palabras.

Tras el crimen, el femicida se baño y preparó una serie de elementos para llevarse: entre ellos ropa, bebidas y alimentos que la pareja había comprado para las fiestas y todos los cuchillos que había en la vivienda. Metió todo en un carro de supermercado con el que cartoneaba y se fue.

La investigación detectó que se fue al Hospital de Trauma de Pablo Nogués para hacerse atender por las heridas cortantes que tenía. Cuando las curaciones aún no habían terminado, se escapó.

Fue buscado intensamente todo el fin de semana. Algunas pistas mencionaban la posibilidad que hubiera ido a Moreno, donde vive su madre. Pero no estaba allí.

Hoy lo encontraron en el hotel Rey, de la calle Lavalle. Al parecer, un encargado del lugar lo reconoció y avisó a la Policía. Efectivos de la Ciudad y de la Bonaerense lo fueron a buscar para detenerlo. En las fotos en las que aparece esposado se puede ver un vendado en unas de sus manos. También un tatuaje en su antebrazo, con la leyenda “Flor te amo”. Un mensaje dirigido a la mujer que decía amar y que asesinó sin la menor compasión.

El femicida tenía un tatuaje en el que le expresaba su amor a la víctima