Fue en la madrugada del domingo, tras compartir una cena con vecinos. Según denunció la víctima, el hombre la golpeó e intentó degollarla con un cuchillo. Los vecinos avisaron a la Policía, que redujo al agresor.

G.A. (su identidad se reserva a pedido suyo) se conmueve cuando recuerda la pesadilla que tuvo que vivir. El sábado a la noche, junto a su novio y a su hijo de 10 años, compartió una cena con sus vecinos del complejo de dúplexs de la calle Colombia y Ambrosetti, en Tortuguitas, que terminaría en un grave episodio de violencia de género.

La cena terminó de madrugada, y ella decidió despedir a su novio, un albañil de 37 años, la misma edad que la suya. "Él había tomado demasiado y ya había estado un poco agresivo. Por eso quise irme. Cuando estábamos en mi casa quería seguir tomando. Le dije que no, que se vaya... ahí empezó todo", narró a Tiempo de Tortuguitas.

Lo que siguió fue un verdadero calvario para ella y su pequeño hijo. El hombre comenzó una escalada de agresiones que comenzó con insultos y enseguida pasó a golpes contra ella. En el baño, trató de ahogarla, y después, con un cuchillo, le hizo cortes en la pera y uno de 8 centímetros en la garganta. "Me decía ‘te voy a matar a vos y a tu hijo'... no sé cómo hice pero logré encerrarme en mi habitación, mientras mi hijo dormía en la suya. Ahí empezó a tratar de tirar la puerta abajo...".

Por suerte para ella y su hijo, la puerta del dúplex había quedado abierta. Por ahí entraron sus vecinos, alertados por los gritos. Trataron de calmar al agresor, pero no pudieron. "Les dijo ‘esto no es con ustedes, es con mi novia y el nene, váyanse o van a terminar heridos'".

Para entonces llegó la Policía, alertada por los vecinos. "Creo que llegaron con lo justo, un par de golpes más y tiraba abajo la puerta", recuerda G.A. angustiada. A la Policía no le fue nada fácil reducir al hombre, completamente descontrolado. Lo lograron con gas pimienta y balas de goma, tras rescatar al pequeño.

La secuencia terminó con la detención del individuo, domiciliado en Tierras Altas. Lo trasladaron a la comisaría de Tortuguitas, que aloja a involucrados en denuncias de delitos sexuales.

La causa recayó en la Fiscalía 20 de Malvinas Argentinas y el Juzgado de Garantías 3 de San Martín. La carátula es "tentativa de homicidio agravado por el vínculo, tenencia de arma blanca y resistencia a la autoridad".

G.A. se conmueve al recordar. "Soy consciente que si no estaban los vecinos nos terminaba matando a los dos". El episodio golpeó fuerte en su vida: "Tengo miedo que salga en libertad y pueda venir a hacernos algo. Por eso decidí mudarme de Tortuguitas. Voy a perder mi trabajo, tendré que buscar un nuevo colegio para mi hijo, pero es la única manera de vivir tranquilos".

ANTECEDENTES

La del sábado no fue la primera vez que había tenido una situación de violencia con quien hasta entonces era su novio. "En septiembre me había golpeado y logré que la Justicia le ponga una orden de restricción por tres meses. Después me pidió disculpas y a mí me pareció sincero. Lo volví a ver de a poco, en lugares públicos y hace poco dejé que entre a mi casa. Parecía algo superado... con mi hijo tenía una relación muy buena, él decía que lo quería mucho, todavía no entiendo cómo pudo pasar esto".

Luis Melillo

AGRADECIMIENTOS

G.A. pidió a Tiempo de Tortuguitas un lugar para "agradecer el accionar de los policías, de las Patrullas y de la Comisaría de Tortuguitas, y el centro de apoyo a la víctima del municipio de Malvinas Argentinas, que tiene un equipo interdisciplinario muy bueno para estos casos".

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