El municipio no le permite usar la cancha de Los Polvorines. Desde el club se quejan de la falta de disposición para encontrar una solución. "Nos sentimos discriminados", aseguraron.

El ejecutivo malvinense no da explicaciones, pero sigue negando la posibilidad que el Atlético San Miguel pueda usar su cancha de José León Suárez al 2800, en Los Polvorines.

El Trueno Verde no juega allí desde diciembre de 2012, a raíz de los incidentes registrados en un partido contra Excursionistas. Esa tarde, un grupo de jugadores y dirigentes del club de Belgrano fueron agredidos por aficionados locales en un área restringida al público, detrás de una platea.

Luego de cumplirse una sanción económica y la suspensión de la cancha, las autoridades del fútbol y los organismos provinciales relacionados con la seguridad en los estadios dieron el ok para la reapertura. Allí surgió la negativa del municipio.

Según trascendió, desde el municipio que maneja Cariglino se plantaron en la exigencia de la habilitación definitiva, teniendo en cuenta que, desde siempre, el club se manejaba con una provisoria.

Desde la entidad se quejan del municipio, que, lejos de ponerse a disposición para destrabar la cuestión, se cierra en un mutismo que parece buscar la eternización del problema.

Ni siquiera la marcha del pasado 17 de enero logró algún cambio. En esa ocasión, un importante número de hinchas partió del estadio hasta el palacio comunal para expresar la bronca por la situación.

Desde el municipio ningunearon la protesta. Una delegación fue recibida por funcionarios de poca jerarquía, con la excusa que "están todos de vacaciones". Y se los invitó a presentar una nota "en febrero".

Poco después, el bloque de concejales del Frente para la Victoria local se ofreció a las autoridades del club para interceder ante el ejecutivo, pero la cuestión no pasó de charlas informales. Representantes de la entidad se habrían excusado con el argumento que cualquier instancia promovida por la oposición "puede enojar más a Cariglino".

En los últimos días de febrero, la subcomisión de fútbol de San Miguel hizo pública una carta en la que expresa con dureza el enojo por la situación.

"Hemos esperado y agotado todas las vías legales y administrativas, pero el Sr. Jesús Cariglino y sus funcionarios no se explayan al respecto, ni tampoco cooperan en la solución de un tema de suma importancia para la institución y para la identidad social y cultural de una institución que da contención deportiva a cientos de niños y jóvenes que practican a diario una vida sana", afirman los dirigentes en el texto.

Más adelante, se señala que "El Club Atlético San Miguel está a disposición de las autoridades municipales para trabajar en búsqueda de una solución beneficiosa para todos", pero que "Lamentablemente no podemos garantizar que con la misma objetividad y compromiso actúen los funcionarios con quienes hoy nos sentimos discriminados".

Hasta el momento, el ejecutivo comunal permaneció como siempre, en el más cerrado silencio, y sin dar la más mínima señal que pueda entrever una solución a la cuestión. San Miguel tendrá que seguir mudando su localía a la cancha de Juventud Unida, en Muñiz.

Luis Melillo

Volver